La tomografía tiene la ventaja de que es más rápida, suele ser menos costosa y puede utilizarse para ver varios órganos a la vez, no requiere anestesia y es un estudio mucho más rápido, dura solo 20 minutos, permitiendo al paciente volver a su vida normal de inmediato, es un estudio que nos permite observar el interior del colon y del recto, tanto por dentro como por fuera del mismo.